Pero, ¿por qué no exprimimos el jugo del "sentir" y cambiamos regalos por sentimientos, besos y abrazos? Y ese ha sido mi objetivo para hoy.. Me considero anti San Valentín, porque el verdadero sentir, se vive y se demuestra cada día, ¿no dicen que el movimiento se demuestra andando? Pues hagamos de este día, como otro cualquiera y vivamos los colores con otro significado que no sea el rojo pasión, el único que nos rodea.
Y así fue, nos pusimos manos a la obra e hicimos de estos pequeñajos, una obra de arte. Convertimos el aula en un taller de lenguaje al que llamamos el "taller del amor" y coloreamos corazones con múltiples y diversos colores para después, ser repartidos por todo el colegio junto con un: beso, abrazo y/o sentimiento.
Cambiemos el trabajo diario, por una divertida e inusual actividad.. a repartir amor, s'a dicho¡¡¡¡ (=
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